Energía pura para los días de invierno y homenaje a mi mujer burgalesa. Los ingredientes ahumados, tan típicos de la cocina castellana, ya se pueden conseguir en Málaga, en varias tiendas especializadas o en el Mercado central. Si te parece una comida excesivamente grasa, piensa que muchos platos preparados tiene mucha más grasa que esta receta, que puedes poner este cocido el día después de subir al Maroma, al Torrecilla o al Veleta ... y que un día es un día.
- ½ Kg. Garbanzos (aprox. 1 puñado por persona, remojados la víspera).
- 250 gr. costilla de cerdo ahumada.
- 250 gr. de panceta ahumada.
- 1 chorizo ahumado.
- 1 morcilla de Burgos.
- Agua y sal.
- Utilizaremos una olla a presión.
- Guindillas en vinagre para acompañar.
1. Lavamos muy bien las carnes (incluso dejándolas a remojo unos minutos para eliminar el exceso de sal) y las ponemos a cocer (excepto la morcilla) en la olla a presión junto con los garbanzos, sin tapar, hasta que hierva. En ese momento, desespumamos la grasa y la espuma que se concentra en la superficie.
2. Cerramos la olla y cocinamos a presión 30 minutos contados desde que comienza a sonar la válvula.
3. Abrimos la olla e incorporamos la morcilla, que deberá cocer otros 10 minutos más (sin presión).
4. Finalmente, rectificamos de sal y probamos los garbanzos, que deberán seguir hirviendo unos minutos en caso de no haber quedado tiernos.
La olla se sirve con guindillas en vinagre, vino tinto y una buena hogaza de pan.
- 250 gr. costilla de cerdo ahumada.
- 250 gr. de panceta ahumada.
- 1 chorizo ahumado.
- 1 morcilla de Burgos.
- Agua y sal.
- Utilizaremos una olla a presión.
- Guindillas en vinagre para acompañar.
1. Lavamos muy bien las carnes (incluso dejándolas a remojo unos minutos para eliminar el exceso de sal) y las ponemos a cocer (excepto la morcilla) en la olla a presión junto con los garbanzos, sin tapar, hasta que hierva. En ese momento, desespumamos la grasa y la espuma que se concentra en la superficie.
2. Cerramos la olla y cocinamos a presión 30 minutos contados desde que comienza a sonar la válvula.
3. Abrimos la olla e incorporamos la morcilla, que deberá cocer otros 10 minutos más (sin presión).
4. Finalmente, rectificamos de sal y probamos los garbanzos, que deberán seguir hirviendo unos minutos en caso de no haber quedado tiernos.
La olla se sirve con guindillas en vinagre, vino tinto y una buena hogaza de pan.